En el Café Haussmann de Valdivia es una de las razones por la cual son conocidos y apetecidos los crudos en nuestro país. Esa combinación de carne; posta negra, con pan, limón, ají verde y la salsa casera que solo ellos saben preparar es única. Y es en la unión de esos productos es que se puede encontrar el irrepetible y original sabor de los crudos. Herederos de una tradición alemana en la ciudad, fueron los pioneros en ofrecer crudos a sus comensales, desde sus inicios en 1959. El café ha mantenido su actual ubicación desde la década de los sesenta en la calle O´Higgins 394 y posee un acogedor local a tan solo dos cuadras de la plaza de la ciudad.
Su dueña María Angélica Haussmann es la encargada de producir estos deliciosos menesteres, su abuela empezó con el negocio de los crudos y ella además de mantener la tradición, ha sabido cuidar la receta de su apetecida salsa que le da el toque mágico a cada preparación. El Café Haussman siempre ha sido y será acogedor, mantiene su misma decoración y fachada desde que tengo uso de razón, cuando mi padre me invitaba a comer crudos un sábado por la mañana antes de almorzar.
Sin tanto preámbulo lo primero que solicité a María Angélica, quien es una persona muy amable y acogedora, fue “probar” un crudo. Ella me lo preparó paso a paso, como debe ser. Primero se tiene el pan y luego se agrega la carne que tiene cebolla picada encima, posteriormente se incorpora un poco de limón, la salsa y ají verde. Si uno quiere después puede agregarle una mostaza especial que tienen.
Se recomienda siempre acompañar los crudos con una cerveza y yo no fui la excepción, esta vez preferí la cerveza, roja, artesanal Bundor elaborada en el sector de Isla Teja en Valdivia Podría decir que la mezcla estuvo a la altura de las circunstancias.
Después de tanto agasajo no pude dejar de mirar la vitrina que tienen donde guardan sus tortas, kuchenes y pasteles. Me ofrecieron un delicioso pedazo de su tradicional kuchen de nuez, además de explicarme con detalle su preparación.
La verdad quedé muy contento de visitar el Café Haussmann y conocer de cerca su historia, secretos y tradición. Ellos atienden público de lunes a sábado de 8 a 22 horas, los feriados y domingos son sagrados para ellos motivo por el cual no trabajan.
El local posee una llamativa banca y cuatro mesas, siempre hay gente por lo que uno puede encontrar y experimentar la onda que tiene en todo momento. Sus clientes son estudiantes, universitarios, profesionales, adultos mayores y turistas, entre otros.
Su teléfono de contacto es el 63 2213878.
Facebook: Café Haussmann M.R
Twitter: CafeHaussmann
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