Restaurantes de Moda en Santiago

2661 RESTAURANT, EL SECRETO MEJOR GUARDADO DE PROVIDENCIA

En pleno barrio Los Conquistadores, se encuentra una casa típica de los 50 con sus ventanillas bloque cristal y clásico gomero en su frontis. No hay cartel con la marca del restaurant, ni una anfitriona de largas piernas dando la bienvenida, solo una pizarra que anuncia tímidamente el menú del día y tres foodtrucks en su jardín delantero. Pero no se deje engañar, cruzando su puerta se encuentra un secreto que ha estado haciendo bastante ruido entre los vecinos y oficinistas de la zona. Hablamos de 2661 Restaurant.

Debo decir que soy habitué de los almuerzos del 2661 hace ya bastantes meses, pero esta vez fui tal detective y con el objetivo de re-conocer este lugar. Pero para conocer y entender la propuesta de este particular restaurant es necesario echar un vistazo a su historia y progenitor: Christian Hayes. Christian primero estudió diseño y ya pasado los años estudió gastronomía fusionando la creatividad y el sabor, dos pasiones que tienen un lenguaje que dialogan a la perfección. He ahí la razón de porqué las presentaciones del menú dejan boquiabierto a cualquier visitante.

Antes de 2661 fue Hayes Producciones, una productora a la medida que se nutrió de bastante bagaje en lo que son los eventos gastronómicos. Para este tipo de eventos cuentan con una casa cerca, la que si tiene realmente numeración 2661 y varios foodtrucks bajo el concepto “Food and Road” con cocina móvil.

No es de extrañarse entonces que en 2661 se celebren las fiestas privadas más apetecidas del momento siendo escenario de marcas como Stella Artois o que estén detrás de importantes eventos como Ñam, Feria Ch.ACO o cenas privadas al dueño de Hyndai, príncipe de Jordania, Cenas Sin Nombre, entre otros. 

Teniendo tal curriculum vitae cabe preguntarse, ¿y ahora almuerzos tipo menú a precios competitivos? Pareciera que el proyecto de Hayes es insaciable y mejor para nosotros, los simples comensales. 2661 pasa a ser la alternativa diaria para almorzar, es un pedacito del gran Hayes y toda su propuesta holística gastronómica. Entonces debemos aprovechar.


Sin mayores pretensiones y con una decoración eclética-chilena-kitsch nos entregamos al menú del día. Cada jornada ofrece dos tipos de menú, uno ejecutivo y otro del día. Su propuesta varía día a día pero es siempre consistente y coherente, siendo su último fin sorprender con sabor, estética al comensal y como su imperante retomar la cocina chilena dándole una segunda vuelta.

En un lluvioso día jueves nos adentramos y ocupamos una mesa con un floreado mantel que contrastaba con el hostil día afuera. En seguida llegaron los pancitos amasados que gritaban que los despedazáramos y un jugoso pebre. Partimos con un una rica entrada de Quiche de Espinacas, aprovechando al máximo el producto de estación, y con la cremosidad justa sobre un plato transparente típico de casa de nuestras abuelas. Acompañando esta entrada un nutritivo jugo de zanahoria y mi compañero comensal se aventuró con el de maqui. Con esta mesa llena de color y el apetito ya abierto pasamos a los platos principales. El menú diario tenía Pantrucas con Carne Mechada y el Ejecutivo ofrecía Salmón a la Plancha acompañado de pastas frescas al pomodoro. Dos platos potentes para un día que demanda energía. Sabores típicos que nos recuerdan la infancia donde cada cucharada era contada por nuestras madres, pero aquí son dispuestos en una presentación que no necesita que seamos obligados a comer. Prácticamente te invita a comer y redescubrir platos típicos de la cocina diaria chilena.

Creo firmemente que un menú es menú siempre que incluya el postre. Es el punto final de una frase, sino quedamos en eterno suspenso. 2661 no es la excepción de esta regla y se las juega por sus postres. Como dije, ese día llovía a cántaros y, ¿qué uno quiere cuando llueve? Si sopaipillas pensaste, sopaipillas son. Sopaipillas pasadas con helado de harina tostada como postre y emplatadas en un gran plato ovalado blanco y a su costado una pequeña piscina de chancaca con hielo seco se asemejaba a un volcán en erupción. Inmediatamente me sacó una sonrisa, me sentí como una niña y en casa, a pesar de que afuera no dejaba de llover.

Finalmente, 2661 es una casa, y eso es lo que pretende hacer que sientas. La casa que siempre uno quiere volver, relajarse para comer bien, un espacio íntimo y secreto y que nosotros hemos retornado ya varias veces.


2661 Restaurant
Los Conquistadores 2388, Providencia
Reservas: +569 5633 8164
Instagram: @2661restaurant
Twitter: @2661restaurant
Facebook: 2661 Restaurant


Gabriela Diéguez - Santiago

Periodista, colaboradora de Chile Gastronomía

gdieguez@chilegastronomia.cl

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